El piloto inglés Lewis Hamilton, mientras aguarda por volver a la Fórmula 1 por la pandemia del coronavirus, ha sufrido una trágica pérdida. No dudó ni un instante en compartirlo con sus fans.
Abatido por el dolor, antes de volver a montarse en su monoplaza Mercedes, Hamilton dijo en sus redes sociales que su perra, Coco, falleció de forma abrupta en su residencia. El piloto quiso despedir a Coco con un emotivo mensaje y una galería de fotos de su fiel amiga, quien incluso acompañaba al británico a los trazados.
“Anoche, alrededor de las 21, mi hermosa niña Coco murió en casa con la familia a su lado. Su pequeño corazón cedió, creemos que fue un ataque al corazón. Traté de revivirla pero fue inútil”, manifestó Hamilton, visiblemente hundido por la partida de Coco, a quien adoptó pese a tener graves problemas de salud.
“Era un perro tan especial, nació con tantos problemas y me siento muy afortunada de haberla adoptado. Su criador dijo que tendría que sacrificarla, ya que no se podía permitir pagar todas las cosas que necesitaba para sobrevivir. Pasó por muchas cosas para convertirse en el gran perro perezoso que era”.
Si estas palabras achican el corazón de cualquiera, su escrito vino escrito con lo siguiente: “extrañaré sus ronquidos y lo feliz que siempre estuvo de verme. Tenía sólo seis años, sana y feliz. Naturalmente, mi corazón está roto, pero espero que esté en un lugar mejor con mi tía Diane. Quería compartir con vosotros y agradecer a quienes la amaron y cuidaron”.