La Sopa informa que Britney Spears es quizá una de las estrellas más famosas de todos los tiempos; desde sus inicios la princesa del pop ha cosechado una importante carrera artística, pero también ha sido protagonista de escándalos y polémicas.
Su paso por el Club de Disney quedó atrás, ahora a sus 39 años, Spears lleva más de dos décadas sobre los escenarios y ha cosechado más de 250 millones de discos vendidos.
Este 2 de diciembre, en La Sopa, recordamos el cumpleaños de Britney, haciendo un repaso por los momentos más icónicos y polémicos de su vida.
Nacida en Misisipi, Estados Unidos, con tan solo 17 años alcanzó la fama; su single Baby one more time recorrió el mundo entero y se convirtió en el referente musical de toda una generación a finales de los 90.
No obstante, a pesar de su talento, sus fanáticos todavía recuerdan los cientos de escándalos profesionales y emocionales que han rodeado su existencia. Aunque resulta complicado enumerarlos todos, recordamos aquellos que quedaron grabados en la memoria de la cultura pop.
El beso con Madonna
Corría el año 2003 y una joven Britney, novia del cantante Justin Timberlake, compartía con Madonna y Christina Aguilera, uno de los momentos más recordados de los MTV Video Music Awards.
Según la revista Clase, la cantante alcanzó el “olimpo del pop” al compartir un beso con la reina del género, Madonna, para quien no resulta extraño provocar reacciones diversas entre los fanáticos. ¡Y funcionó! Hasta Timberlake quedó más que sorprendido con la actitud de Spears.
Matrimonio express
La impulsividad es uno de los rasgos que caracterizan a la cantante, pues en el 2004 realizó un viaje a Las Vegas con Jason Allen Alexander, un amigo de la infancia, y tal parece que quería vivir la experiencia completa en la ciudad, pues terminó casándose con él.
Su matrimonio duraría solo 55 horas, luego de que fuese anulado tras comprobarse que Spears no se encontraba en un estado “que le permitiese ser consciente de sus acciones” Ups!
Las malas compañías
Como toda veinteañera, a Britney le gustaba festejar, así fue como hizo amistad con Paris Hilton y Lindsay Lohan, celebridades conocidas por sus desaforadas salidas nocturnas.
Cuando el trío se juntaba, era seguro que su festejo saldría en las portadas; pero con el paso del tiempo, el descontrol afectaría significativamente la vida de la cantante, quien comenzó una lucha contra las adicciones al alcohol y las drogas en varios centros de rehabilitación.

Britney se convierte en madre
El 18 de septiembre de 2004, Britney contrajo matrimonio con el bailarín Kevin Federline, de esta unión nacerían en 2005 y 2006, sus hijos Sean y Jayden.
La maternidad transformó completamente la vida de la intérprete, quien luego de un corto período de normalidad, fue diagnosticada en 2007 con un trastorno de personalidad que la obligó a renunciar a la custodia de sus hijos.
Según el portal El Mundo, no fue sino hasta el 2015 que Spears pudo recuperar la tenencia parcial de los niños y vivir con ellos.
Su irreverente cambio de look
Luego de la polémica separación de sus hijos, la intérprete de Toxic fue internada en un centro de rehabilitación, donde aparentemente intentó acabar con su vida.
Tras haber recibido el alta, Britney ingresó a una peluquería y le pidió a la esteticista que le rapara todo el cabello, pero este se negó, por lo que la cantante tomó la máquina y se rapó ella misma.
Como comenta Vanity Fair, luego de esto, la princesa del pop se puso a llorar frente al espejo, lo que acrecentó los rumores de que se encontraba bajo los efectos de algún narcótico.
La entrada al psiquiátrico
En el 2008, Britney Spears protagonizó un nuevo escándalo al salir con sus hijos y negarse a entregarlos a su esposo Kevin Federline. Esto llevó a las autoridades a considerar que se encontraba de nuevo bajo los efectos de las drogas y acabó por ser recluida en un hospital psiquiátrico.

Desafortunadamente muchos consideraron que la artista era un peligro para ella misma, por lo que un juez la declaró incompetente y su tutela pasó a manos de su padre, quien además se encarga de manejar sus finanzas.
Desde entonces, la cantante parece haberse recuperado de su tormentoso pasado, y ahora exige a la corte que le devuelva su libertad. La decisión ha sido respaldada por sus fanáticos, quienes desde hace casi una década han creado el movimiento #FreeBritney en apoyo a la princesa del pop. La Sopa.