En el año 2000, un ejecutivo de la cadena Hard Rock Café fue invitado al país. Los dueños de la constructora Sambil hicieron el enlace con unos empresarios que deseaban obtener la franquicia. Los espacios disponibles impactaron al directivo. Caracas hizo su magia.
El lugar sugerido superó las expectativas. Aquella terraza y su imponente vista conquistaron al exigente comerciante. Además, y como guinda de pastel, el área contaba con un anfiteatro de 1300 butacas.
Los acuerdos se firmaron en el año 2002. Ni siquiera el paro petrolero detuvo las ganas. Tres años después, y a todo volumen, Venezuela abría las puertas al restaurante temático más importante del mundo.
Los caraqueños acompañaron con júbilo la noticia. Esperar horas para ingresar al recinto se volvió la regla. “Llegamos a tener 1000 personas diarias durante los primeros años. La rotación era altísima” nos comenta una ex gerente, que pidió no ser nombrada.
“Tuvimos la tarima más vibrante del país. Durante 7 años hicimos “Viva Rock Latino” donde más de 500 bandas compartieron. Fuimos pioneros en los desfiles de moda a nivel mundial”.
Las piezas decorativas del local han sido, quizás por mucho, más famosas que la propia comida y así no los confirma la ex empleada: “Dentro del establecimiento llegamos a tener mas de 235 exhibiciones originales. Entre ellas: una guitarra de George Harrison -integrante de The Beatles-, un manuscrito de Elton John, ropa intima de Madonna y artículos de Phil Collins”
“Los representantes internacionales estaban felices con nosotros, fue tanto el éxito que se pensó abrir un hotel. Tuvimos más de 126 empleados. Nuestro personal fue reconocido y algunos de ellos contratados en el extranjero. Fueron 15 años de logros”.
Con respecto al motivo del cierre, la exgerente comentó: “No somos el primer local con una situación difícil. La crisis generada por el COVD-19 ha impactado a muchos. La filosofía de la empresa es seguir buscando opciones. A este país le debemos mucho. Nuestro espíritu, como buenos rockeros, no se detiene ¡Animo, Venezuela!”