Jorge Rodríguez «honra» la memoria de su padre convirtiéndose en cómplice de los castigos físicos que infringen los funcionarios del régimen de Nicolás Maduro, opinó este martes el diputado de la Fracción 16 de Julio, José Luis Pirela.
«Es infeliz que el homenaje que le haga Jorge Rodríguez a la memoria de su padre, quien murió en manos de unos esbirros que lo torturaron en la Disip, pero que fueron castigados, sea que hoy se convierta en cómplice de tortura», dijo el diputado a las afueras del Palacio Federal Legislativo previo a la sesión de la Asamblea Nacional donde debatirán sobre el asesinato del capitán de corbeta Rafael Acosta Arévalo.
Jorge Rodríguez padre murió en 1976 a consecuencia de las torturas que sufrió en la extinta Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip), actual Sebin.
«Este crimen (el de Arévalo) nos recuerda el caso del piloto rebelde Oscar Pérez y el del concejal Fernando Albán. Esto es preludio de una violencia de un régimen que aplica el terrorismo de estado», agregó Pirela.
Afirmó que Diosdado Cabello dijo desde su programa semanal Con el mazo dando, que tenía pruebas del supuesto golpe de Estado que pretendía hacer el capitán de corbeta.
«Si tenían información verificada ¿cuál era la necesidad de torturarlo hasta asesinarlo?», preguntó el diputado.
«Se supone que alguien que haya visto en la adolescencia a su padre luchar por unas ideas y morir por esas ideas, el homenaje que le haga es precisamente convalidar las prácticas con la que fue asesinado su padre», sentenció Pirela.
Asimismo, desestimó las declaraciones del Ministerio Público e indicó que no cree que los funcionarios detenidos fueron partícipes en los hechos de tortura.