El cadáver del capitán de fragata Rafael Acosta Arévalo fue trasladado desde la morgue de Bello Monte al Cementerio del Este para su sepultura.
De acuerdo a las declaraciones del abogado de la familia, Alonso Medina Roa, fue el mismo Estado el que ordenó se realizará el sepelio en el mencionado camposanto.
«Podemos interpretar que están aplicando una política de yo lo mato, yo lo entierro», declaró el abogado con relación a la inhumación controlada.
La Policia Nacional Bolivariana (PNB) cerró el paso a los medios de comunicación y a cualquier otra persona que quisiera pasar hasta el Cementerio del Este por al menos 30 minutos. No obstante, ya la circulación fue restituida.