Julieta Ovalles, madre de Luigi Guerrero, pidió justicia una vez más, dijo que los organismos que deberían procurar que ningún crimen quede impune «le han tomado el pelo».
Luigi era su único hijo, estudiaba tercer año de Comunicación Social y como muchos jóvenes el 23 de enero salió con su bandera a luchar por su país y encontró la muerte. «El Mi hijo cumple cinco meses de haber sido asesinado, siento que se han burlado de mi dolor, pues nadie ha hecho nada», expresó con voz entrecortada.
Dijo que su hijo era un muchacho sano, pacifico y noble que no merecia morir en manos de presuntos colectivos. «Esto es una crueldad, primero haberlo asesinado y doble crueldad lo que han hecho conmigo, me ha tocado investigar todo, buscar videos, testigos, todo para saber lo que le pasó a mi hijo», exclamó esta madre llena de dolor y sed de justicia.
Pidió a Michelle Bachelet que se ocupe de los casos de las víctimas de la represión en el país.
«Le pedimos a la señora Bachelet para que nos ayude a que haya justicia y cero impunidad, no puede ser que esto quede así cuando allí participaron los cuerpos de seguridad y los colectivos, mi hijo no era un malandro, era un inocente, un hijo de Dios», señaló Ovalles.
Aseguró que no descansará y seguirá en su lucha hasta lograr que quienes le cegaron los sueños a su hijo paguen por este crimen.