Con un ambiente entre tenso y sereno, la Asamblea Nacional fue testigo este martes del regreso del primer vicepresidente del Parlamento, Edgar Zambrano, luego de haber pasado cinco meses siendo preso político del régimen de Nicolás Maduro; y de la reincorporación de la bancada chavista que tenía dos años sin sesionar en Palacio; que por supuesto, regresó acompañada de sus amigos colectivos que no perdieron oportunidad de amedrentar a diputados y periodistas.
La bancada del régimen llegó en combo vociferando sus acostumbradas consignas para tratar de “invocar” al fallecido Hugo Chávez. Llegaron con actitud estratégicamente pacífica y aseverando que no iban a poder sesionar porque en el hemiciclo “no había” quórum.
Sin embargo, al ingresar al hemiciclo, el escenario era totalmente diferente, la presencia de los diputados del la oposición era visiblemente favorable y aquella frase del chavismo no fue más que su primer desacierto durante la sesión.
Minutos más tarde, mostrando tranquilidad, seguridad y temple, ingresó la directiva de la AN, El presidente encargado de la República, Juan Guaidó, el primer vicepresidente de la AN, Edgar Zambrano tras sus cinco meses de cautiverio; y el segundo vicepresidente del Parlamento, Stalin González.
El chavismo no perdió oportunidad y en su ahogado primer derecho de palabra no dudó en mencionar el caso de la fotografía de Guaidó con presuntos paramilitares, miembros de la banda de Los Rastrojos.
La tensión, inquietud y desespero de la bancada chavista se dejó ver en sus acostumbradas “lanzadas de puntas”, discursos escuetos y repetitivos, de esos que son característicos de 20 años de “revolución chavista”.
Cada una de las intervenciones de la oposición los enterraba más, los chavistas que durante dos años no fueron a la Asamblea por considerarla “en desacato”, terminaron allí, sentados nuevamente en sus curules.
Durante toda la sesión fueron incapaces decirle a Guaidó presidente encargado de Venezuela, ni presidente de la Asamblea, cosa que no se le escapó al diputado Henry Ramos Allup, que no vaciló en encararlos.
Aquellas intervenciones que solo dejaban ver las costuras de la bancada del régimen, un amigo de estos, se atrevió a subir al palco de prensa para amedrentar a una extrabajadora de Antv que se atrevió a interrumpir el discurso del diputado chavista Darío Vivas.
“Dí la verdad, nos despediste, te robaste los equipos, no mientas”, le gritó la mujer desde el palco de prensa del Parlamento.
Seguido a ello, apareció el “amiguito” de los diputados chavistas a amedrentarla a ella y a otras periodistas que le pidieron que abandonara la zona de la prensa. El hombre trató de quitarle el celular a un trabajador de la prensa que registraba el momento.
La sesión terminó con lo que ya se acostumbra a ver de la bancada chavistas, argumentos rebuscados contra la Presidencia Encargada y demás diputados, chistes de mal gusto, burlas y amedrentamiento contra periodistas por parte de un adepto al régimen.
A las afueras de la AN estaban otros colectivos que no dudaron a insultar, gritar y generar tensión mientras salían los diputados de la oposición.