Uno de los mitos más populares del deporte es que antes de una competición no se debe practicar sexo, ya que esto reduce las condiciones físicas, pero, ¿Es realmente cierto este mito?
En la actualidad se han realizado cientos de estudios sobre el tema que han logrado demostrar todo lo contrario y han dejado en el pasado los consejos sobre no tener relaciones sexuales previas a realizar deporte.
Tener una sesión de sexo previo a un evento deportivo no debería suponer una gran pérdida de energía, debido a que, en unas condiciones normales el desgaste medio de una práctica sexual podría equivaler al que se emplea en subir por las escaleras un par de pisos.
El esfuerzo empleado en tener sexo vendría a ser muy inferior, incluso, al hecho por los deportistas cuando calientan el cuerpo antes de hacer un ejercicio de alta intensidad, reseñó 20 Minutos.
Además, entre los beneficios que aporta la práctica sexual está la liberación de endorfinas que provocan que esas personas aumenten considerablemente su estado de euforia, lo cual es muy favorable de cara a motivarse de cara a la competición que les espera al día siguiente o a las pocas horas.